Como sabe, es importante que sus trabajadores encuentren el equilibrio entre la vida profesional y la personal. Vea cómo puede asegurar el derecho a la desconexión digital en el contexto actual de digitalización y sobreexposición tecnológica.
Desconectar del trabajo
Derecho. El derecho a la desconexión digital implica que sus trabajadores deben limitar el uso de las tecnologías de comunicación fuera de su horario laboral para respetar su tiempo de descanso (que incluye períodos de permisos, de vacaciones o de bajas médicas).
El objetivo es facilitar la conciliación entre la vida laboral y la personal y fomentar el bienestar de sus trabajadores, evitando la presión que puede ocasionar el hecho de recibir instrucciones fuera de la oficina y del horario laboral o de responder llamadas o mensajes una vez finalizada la jornada.
¿Cómo garantizarlo? Es importante que limite para todos los empleados –incluidos los puestos directivos– el uso de medios tecnológicos para el trabajo durante los períodos de descanso.
Existen algunas excepciones derivadas de las características de algunos puestos de trabajo; por ejemplo, aquéllos que requieren de disponibilidad o localización para atender llamadas u otras comunicaciones de la compañía (como las guardias). Estas situaciones se deben regular por escrito y compensarse económicamente mediante un complemento.
Protocolo de desconexión
Es necesario elaborar un protocolo de desconexión digital que contenga los siguientes puntos:
Análisis de la situación. Propuesta de las medidas a implantar, concreción de los horarios y de la política de comunicaciones y puesta en conocimiento a los empleados.
Negociación colectiva (consulta con la RLT).Si en su empresa hay representantes, negocie con ellos las medidas y el contenido del protocolo.
Aplicación del protocolo . Deben hacerse efectivas las medidas necesarias para facilitar y garantizar la desconexión digital (incluyendo un plan de seguimiento y evaluación).
Posibles excepciones. Deben incluirse en la política de desconexión digital (sería el caso de las guardias, por ejemplo).
Medidas periódicas. Deben establecerse medidas de comunicación, formación y sensibilización sobre el derecho a la desconexión digital.
Incumplimiento. Vulnerar este derecho a la desconexión digital puede suponer incurrir en diferentes infracciones:
Se considerará una infracción grave –sancionable con multa de hasta 7.500 euros– el hecho de superar el límite de jornada o de no respetar los descansos mínimos.
Si además vulnera el derecho a la intimidad y conciliación del trabajador (por ejemplo, al llamarle a su número de teléfono personal sin autorización), la infracción puede llegar a ser muy grave, sancionable con multa de hasta 225.018 euros.
Condena. Evite enviar correos electrónicos a sus trabajadores fuera de su horario laboral (en particular, si han trasladado su deseo de no recibirlos durante su tiempo libre); de lo contrario, podrán interponer una demanda o denunciarle a la Inspección. ¡Atención! Tenga en cuenta que los tribunales han condenado a diversas empresas al abono de una indemnización de 1.000 euros por incumplir el derecho a la intimidad de sus trabajadores y por los daños y perjuicios ocasionados.
Si incumple el derecho a la desconexión digital de sus trabajadores, le podrán imponer multas de hasta 7.500 euros. Elabore un protocolo para que todos los trabajadores y directivos sepan cómo actuar al respecto.
Fuente. Lefebvre